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TERMINÓ EL RODAJE GUBERNAMENTAL
4 mayo, 2018

Pese a sus evidentes esfuerzos por mantener una sintonía fina con el acontecer nacional, a poco menos de cumplir dos meses en el ejercicio del poder, el Ejecutivo se ha visto enfrentado a un abrupto fin de la “luna de miel” que suele experimentar toda Administración. Si bien parece ir sorteando la ripiosa coyuntura, que ha incluido la interpelación en la Cámara de Diputados al Ministro de Salud y las primeras movilizaciones sociales de estudiantes y del movimiento No + AFP, la mayor parte de los problemas han tenido su origen en errores del propio Gobierno, siendo la situación generada por la nominación de Pablo Piñera la más compleja. Las acusaciones de nepotismo desde distintos sectores de la oposición y el anuncio de una iniciativa legislativa por parte de Evopoli en el mismo sentido, instalaron fuertemente el tema en la agenda.

Los abusos sexuales a menores serán imprescriptibles. La indicación sustitutiva al proyecto de ley anunciado en La Moneda por el Presidente Piñera, sorprendió positivamente a todos los sectores, especialmente considerando la alta sensibilidad pública generada por la muerte de Ambar, la pequeña que falleció tras ser violentada y abusada reiteradamente por quienes fueron designados por el Estado como sus cuidadores. A este lamentable hecho se sumó la sentida petición de James Hamilton al Mandatario en conferencia de prensa, tras concretar la esperada cita con el Papa Francisco. En la reunión del Sumo Pontífice con tres de las víctimas de Karadima en el Vaticano, la máxima autoridad eclesiástica se reconoció a si mismo como parte del problema y pidió perdón a modo personal e institucional, en un hito inédito en la historia de la Iglesia Católica, provocando alto impacto en una agenda noticiosa nacional e internacional. Ahora, el acento está en las expectativas por las decisiones que pudiera tomar el Papa de acuerdo a lo expresado por el propio Hamilton quien señaló que, de lo contrario, las palabras de perdón de Francisco serían “letra muerta”.

En el ámbito judicial, junto con el inició de un proceso de cierre de gran parte de las causas por financiamiento irregular de campañas, gran revuelo generaron las diversas interpretaciones sobre las declaraciones del Fiscal Nacional, Jorge Abbott, en su tercera cuenta pública, donde llamó a los fiscales a ser cuidadosos cuando sus investigaciones pudieran afectar el funcionamiento de otros poderes del Estado, en clara alusión a los procesos de desafuero a parlamentarios.

Clave1: LA DURA REALIDAD: Sebastián Piñera inició su segundo mandato haciendo gala de un perfil más templado y tranquilo, dando cuenta de un primer período en que acumuló experiencia y proyectando tener certezas y la fórmula para consolidar la aspiración del oficialismo de lograr un segundo período en La Moneda. Esta vez, especialmente considerando la minoría parlamentaria, se aprecia mayor sentido de las limitaciones de un gobierno, un diseño serio, una agenda planificada y un mejor esfuerzo por sintonizar con la sociedad chilena, y con los cambios que ésta ha experimentado y a los que aspira.

No obstante, los duros hechos han comenzado a mostrar las complejidades de gobernar. Posiblemente, el Mandatario no esperaba que las dificultades y distracciones del objetivo, a tan poco andar, surgieran del seno del propio Gobierno. Los errores y “salidas de libreto” de sus ministros han obligado al Mandatario a desviar, una y otra vez, sus esfuerzos y energía en explicar y corregir. Es claro que la orquesta suena desafinada, lo que orada rápidamente la imagen de eficiencia y buen gobierno inicial.

- La situación más compleja, sin embargo, fue provocada por la nula capacidad del propio Presidente para prever lo que generaría la nominación de su hermano, Pablo, como embajador en Argentina, una de las sedes diplomáticas más apetecidas por su importancia geopolítica para nuestro país. Múltiples acusaciones de nepotismo fueron desestimadas por Piñera que, en una actitud más propia de su período anterior, se empecinó más tiempo del razonable defendiendo su decisión. Finalmente, fue el Contralor de la República quien entregó una salida al Ejecutivo al señalar que el requerimiento presentado por parlamentarios podría tardar en resolverse aproximadamente 6 meses, cuestión que sirvió como argumento para “bajar” la malograda nominación. Pero el daño a la imagen presidencial está hecho. El episodio demostró la escasa capacidad del Gobierno para anticipar posibles conflictos, especialmente si se considera el rechazo y el estado de ánimo de la ciudadanía respecto de estos temas en política.

- El Gobierno retiró un proyecto de ley que otorgaba, por una vez, una compensación económica a víctimas de la dictadura que fueron detenidos y torturados por agentes del Estado. Lo hizo sin previo aviso a sus propias bancadas y cuando el proyecto ya había sido aprobado en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara Baja. Más allá de la polémica generada por los inaceptables dichos del Diputado Urrutia (UDI) en la sala, el oficialismo presentó sus quejas al Ejecutivo por lo que consideraron un problema perfectamente evitable de haber sido informados oportunamente. Es evidente que el Gobierno deberá afinar su relación con sus bancadas, ya que dar por descontada su incondicionalidad y descuidar su trato suele generar molestias que, como se ha podido apreciar en el pasado, pueden ser el germen de una dispersión de los apoyos de las fuerzas propias, con graves consecuencias para la gobernabilidad y el liderazgo del Ejecutivo.

- El Presidente Piñera, luego del Oscar recibido por la película chilena Una Mujer Fantástica y a pesar de la controversia que el tema provoca en su propio sector, tomó la decisión de liderar la presentación del proyecto de ley de Identidad de Genero. Con ello, así como con otras iniciativas como el inicio del proceso de regularización de inmigrantes, el Mandatario ha demostrado gran capacidad para reaccionar a la contingencia. No obstante, el riesgo está en que la agenda de la coyuntura termine imponiéndose a la planificada por el Gobierno. Ya desde diversos sectores del parlamento se critica una suerte de “sequía legislativa” en relación a los compromisos iniciales y del programa gubernamental. El Ejecutivo debe tener la destreza para avanzar paralelamente, tanto en los temas que surgen de la ciudadanía como en su propia agenda. Lo contrario arriesga una pérdida de conducción y liderazgo, y convertir la gestión en un proceso reactivo, eclipsado por la coyuntura.

Clave2: CRUZANDO EL DESIERTO: Luego del estrepitoso fracaso electoral en los recientes comicios presidenciales y parlamentarios, la mayoría de los partidos que integraron la ex Nueva Mayoría han iniciado procesos internos, ya sea de reflexión o elecciones, intentando salir del estado de paralización en que quedaron. En el caso de la Democracia Cristiana, tras la renuncia de Soledad Alvear, en estos días fue Gutemberg Martínez quien abandonó la tienda, anunciando la creación de un nuevo referente político que buscará preservar el ideario del humanismo cristiano, según señaló.

El Partido Socialista por su parte, ha efectuado jornadas de reflexión, en tanto el PPD enfrentará en algo más de un mes elecciones internas.

Lo concreto es que se está desarrollando un proceso que estaba pendiente ya desde antes del último gobierno de Michelle Bachelet y que el liderazgo que representó la ex Mandataria como posibilidad de volver al poder, postergó como prioridad política del sector. En tal sentido, sea cual sea el resultado, lo evidente es que se ha iniciado un camino de introspección que es la base para operar cualquier cambio o renovación que se pretenda.

La posibilidad de construir una oposición sólida, cuyo aporte es fundamental para los necesarios equilibrios en un régimen presidencialista como el que rige en el país, requiere resolver temas como crisis de identidad, capacidad para salir de la conflictividad interna y recuperar el ejercicio de una política en sintonía con las preocupaciones y las particularidades de la sociedad chilena.

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